Ruptura Colectiva (RC)

31 de marzo de 2017. Guerrero, Méx. El pasado domingo, la comunidad indígena ñomndaa de Juquila Yucucani ubicada en el municipio de Tlacoachistlahuaca en la Costa Chica de Guerrero, decidió retener a tres funcionarios del Ayuntamiento municipal -incluído el director de Obras Públicas de la localidad- debido al incumplimiento de un acuerdo del pago de una indemnización de un millón y medio de pesos a los agricultores afectados por la quema de varias hectáreas de tierras por el ejército en 2016. Estos sembradíos -ligados a los cárteles de la droga en la Costa Chica de Guerrero y Oaxaca- eran principalmente de amapola, por lo que fueron incinerados por el ejército mexicano y efectivos de la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA), sin embargo, el fuego se extendió hasta los plantíos contiguos de maíz y árboles frutales de los campesinos locales, dejándolos en un severo problema de trabajo y producción alimenticia.

El alcalde de Tlacoachistlahuaca, Juan Javier Carmona Villavicencio, arribó por la mañana del lunes para intentar dialogar con la comunidad por la liberación de los tres funcionarios, sin embargo, distintos manifestantes le achacaron que el dinero de la indemnización ya había llegado al  Ayuntamiento pero que nunca se entregó a los directamente afectados, por lo que decidieron encerrarlo en una celda de la Comisaría Municipal durante 12 horas. Pobladores denuncian también que se ha solicitad la construcción o remodelación de una nueva Comisaría y una iglesia, pues de acuerdo con fuentes locales, “el municipio ha sido olvidado por años y años sin que se invierta en las calles, el alumbrado y las necesidades de la gente, en su mayoría, indígena”.

En esta localidad, también operan unas decenas de policías comunitarios de la CRAC-PC desde finales de 2014. El asesinato del comunitario Guillermo Pantaleón de Jesús en la comunidad de Las Minas, provocó que los coordinadores regionales insistieran a las autoridades de Tlacoachistlahuaca para que apoyaran con equipamientos y apoyos económicos a los voluntarios, dejando entrevisto que existía cierta complicidad entre la violencia criminal y el enriquecimiento de los ediles desde ese año.

Volviendo a los hechos recientes… Tras liberar al edil, la gente advirtió que de no cumplirse sus peticiones, expulsarían a todos los políticos del Ayuntamiento y él permanecería encerrado de manera indefinida.

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