Liberar la tierra, cosechar la dignidad

13434846_275498126136163_4057331153868886517_n

Sembrar no es un acto tan sencillo como se cree. En el Norte del Cauca, Colombia, el milenario pueblo nasa está dando una lección a la que hay que ponerle una atención especial, ya que como pedagogía de resistencia, nos enseñan todos los mecanismos que obstaculizan a la primera actividad económica del hombre sedentario: la agricultura, y por ende, la alimentación.

En esta video-entrevista, los compañeros del medio libre Rebeldía Contrainformativa, dialogan con un liberador directo de la Madre Tierra en torno al origen de esta práctica de acción directa en diversas fincas destinadas al monocultivo de caña, que además de generar un deterioro al ambiente por sus altos niveles de toxicidad, arrastrá al hambre y escasez a las comunidades que habitan en Corinto y sus inmensas montañas.

Balas, gases lacrimógenos e inclusos recalzados -armas ancestrales- cargados con municiones de tornillos, grapas y puntillas, son herramientas represivas que el ESMAD y grupos armados, contratados por los terratientes más poderosos de la región, usan para disuadir las mingas que comenzaron desde el 14 de diciembre de 2014.

~¿Cómo se organizan en este territorio?~ pregunta el entrevistador.

~Con alegría, amor, cantos y danza. Nosotros no somos los que molestan (…) ellos nos están molestando a nosotros~ responde el valiente liberador con un gesto en el rostro.

LIBERACIÓN DE LA TIERRA, AUTONOMÍA Y RESISTENCIA

Pese a que el movimiento indígena del Cauca le dice Si a la paz, el gobierno nacional arremete con violencia contra las comunidades indígenas desarmadas y no reconoce sus reclamos legítimos por la recuperación de sus territorios ancestrales, base material para la supervivencia cultural del pueblo Nasa.

Este lunes 26 de septiembre, cuando en Cartagena se firmaba el acuerdo de paz con la insurgencia, en zona rural de Corinto, norte del Cauca, la minga indígena por la liberación de la tierra fue agredida con armas de fuego por agentes policiales del establecimiento, poniendo en riesgo la vida de la comunidad. Frente a estos hechos reiterados de violencia no parece creíble la promesa de paz de Cartagena, por el contrario se avizora la represión contra los movimientos sociales y populares.

La paz la construyen los pueblos organizados desde la autonomía y la horizontalidad, caminando de manera solidaria por el logro de las transformaciones sociales y políticas que permitan un buen vivir digno para las comunidades.

Realizamos un llamado de solidaridad a las organizaciones sociales y populares, a las organizaciones de derechos humanos y medios de comunicación alternativos para que acompañen de manera activa la lucha por la tierra de la nación nasa.

Aquí una entrevista con un liberador de tierra del norte del Cauca en donde se narran las difíciles condiciones de represión e intimidación que tienen que soportar las comunidades indígenas nasa en su lucha por territorio y autonomía.

539 total views, 4 views today

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.