Ruptura Colectiva (RC)
Por la tarde de este sábado 7 de enero, miles de mineros organizados en la Sección 271 del Sindicato de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana, en el municipio de Lázaro Cárdenas, Michoacán, tomaron las calles con mantas, consignas y acompañados de organizaciones del comercio popular, grupos de izquierda extrema y algunos otros de carácter civil, en repudio al aumento de los precios de la gasolina y el embate que se aproxima contra la canasta básica, los servicios públicos y el salario de los trabajadores mexicanos.
La mayoría de ellos, son empleados de Arcelor Mittal, una multinacional que ha ganado terreno en el puerto michoacano. Entre sus exigencias -junto a la de la mayor parte de los mexicanos- se encuentran el “no al aumento del costo y a la privatización de PEMEX, los hidrocarburos, la luz, el gas LP y la educación”.
La marcha culminó con un mitin en el Monumento a Cárdenas, donde dirigentes sindicales y de distintas organizaciones sociales llaman a “no tomar esto como coyuntura, sino como una muestra del gobierno de Enrique Peña Nieto que nos llevará a la pobreza y preocupación diaria por nuestros ingresos como trabajadores, especialmente a todos los agremiados obreros que laboran en la industria energética”.
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